Sí, los textos tienen sus años, pero ahí están vivos y con ganas de comunicar. Y como siempre gracias a chicos y chicas que aprenden a hacer teatro. Me emociona, la verdad.
Se trata de mis Veinte monólogos estudiantiles y un diálogo inesperado a través de una adaptación. Luego escribí Entremonólogos (estudiantiles) donde los personajes de los monólogos se encontraban.
Lo leo, a través de la inmensa red, en un periódico. Es cierto que no se menciona al autor, pero a eso ya estamos acostumbrados.
Gracias al IES Juan de Juni de Valladolid por elegir mi texto. Ojalá la experiencia sea gozosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario